La Eco Economía Una Nueva mirada en la economía
Las Relaciones
entre la Economía y la Ecología.
A teoria econômica e os indicadores
econômicos não explicam como a economia está perturbando e destruindo os
sistemas naturais da Terra. A teoria econômica não explica por que o gelo do
Mar Ártico está derretendo. Não explica por que os prados estão se
transformando em desertos no noroeste da China, por que os recifes de coral
estão morrendo no Pacífico Sul ou por que os pesqueiros de bacalhau em Terra
Nova entraram em colapso.
Lester Brown
Las relaciones entre medio ambiente, energía
y economía se han manifestado de manera relevante ocupando un puesto de vital
importancia para la discusión intelectual y académica en los
últimos años como consecuencia de los procesos de desarrollo económico y a las crisis
energéticas, ambientales y las críticas a los presupuestos epistemológicos de
las distintas ciencias y los cambios que éstas están efectuando. En este corto y esquemático
documento, se pretende mostrar los principios que tradicionalmente han
sustentado estas relaciones así como mostrar que la Ciencia Económica aún no ha
adaptado su marco teórico para tener en cuenta los cuestionamientos que en la
actualidad se le hacen; por último, se sugieren algunos cambios que valdría la
pena se suscitasen en el marco teórico de la Economía para detener las
consecuencias que las relaciones vigentes han tenido en la práctica.
La
Eco Economía y su Importancia.
Como lo explica el profesor Lester Brown (2002, p.110) “La Eco-Economía es una corriente del
pensamiento económico que busca dar respuesta teórica a un problema real: las
crisis ambientales humanas” En
el mundo actual, tal y como entendemos la vida, el crecimiento económico es el
único objetivo que han de tener los países, sociedades, regiones, empresas o
personas. No hay otro motivo por el que existir. El crecimiento económico debe
ser el camino para conseguir todo lo demás.
Hoy en día, vivir es
crecer. Así, en el mundo actual nos encontramos con tres procesos que son
continuos: el crecimiento, la producción mundial que
desde los años sesenta se manifiesta de manera contundente como resultado de
las actividades y el consumo. Ahora, estos procesos dependen uno del
otro, por ello, es necesario su interacción para que se mantengan. Por ejemplo,
sin producción no hay consumo, así como sin crecimiento no hay producción, o
sin consumo no hay producción. ¿Para qué sirve una empresa que no crece
económicamente? ¿Qué papel juega una región que no tiene crecimiento económico?
¿Tiene éxito una persona que no gana cada vez un poco más de dinero? El sistema
económico predominante se basa en el crecimiento continuo, y esa idea ha
conseguido traspasar los ámbitos económico o político y se ha implantado en lo
más profundo de las consciencias de las personas. La gente vive convencida de
que el crecimiento es sinónimo de éxito y de felicidad. Y, ¿quién no quiere ser
feliz?
Todo comienza con el consumo. La
realidad demuestra que, a mayor nivel de desarrollo económico, las sociedades
tienden a ser más consumistas. Y una sociedad consumista es una sociedad que precisa
de muchos recursos, que en su gran mayoría, se extraen del medio ambiente que
nos rodea. Es decir, el consumo afecta al medio ambiente, y casi siempre de una
manera negativa, ya que el modelo de consumo actual es resultado de la
evolución histórica del sistema de producción capitalista, que como decía Marx
se basa en la producción generalizada de mercancías. La sociedad de consumo
contemporánea nace con la llegada de la producción de masas fordista y con la
puesta en práctica de las políticas keynesianas tras la II Guerra Mundial, que
permitieron un aumento del nivel de vida de la clase trabajadora y de los
sectores populares, así como su acceso al consumo de masas. Ahora, la propia lógica del sistema capitalista genera la creación
artificial de necesidades de consumo, con el objetivo de mantener un nivel de
producción constante. Se crea la percepción de que necesitamos más para vivir
mejor y aparecen nuevos productos que se convierten en indispensables y que
fomentan una cultura del gasto permanente. De forma que la actual función del
consumo no es cubrir necesidades, sino satisfacer deseos. Y como tenemos muchos
más deseos que necesidades, el sistema actual se caracteriza por un alto nivel
de consumo, que ha llegado a volverse patológico en la sociedad, y por ello
hablamos de consumismo.
¿Qué estudia la Eco Economía? El problema básico que estudia es la
sostenibilidad de las interacciones entre los
subsistemas económicos y el macro sistema natural.
Dicha sostenibilidad entendida como la capacidad de la humanidad para vivir dentro de los límites ambientales es enfocada
como metabolismo social, la sociedad toma materia, energía e información de la
naturaleza y le expulsa residuos, energía disipada e información aumentando la
entropía. La sostenibilidad no es
posible encontrarla por la concepción del mercado de la economía convencional. Ahora dentro de las diferencias que puedan
existir La Eco Economía tiene un enfoque distinto al parcelario (útil hasta
cierto punto) y analítico enfoque de la economía convencional (la economía
separada de la biología, separadas de la física...), pues considera a la
economía como un subconjunto de la sociedad y ésta de la biosfera. Este cambio
de visión tiene profundas implicaciones. Así la Eco Economía incorpora conocimientos
de diferentes ciencias incluyendo la ecología ya que estudia los flujos de
materia y energía de la vida sobre la Tierra, y la economía humana está
incluida en este sistema, ya que se estudia la economía como un objeto natural
y social.
Una descripción extensa de las diferencias y críticas a la
actual teoría económica por los economistas ecológicos se encuentra su
aproximación a las interacciones entre la naturaleza y la sociedad. Los
análisis desde el punto de vista de la economía convencional minusvaloran el
capital natural, en el sentido de que es tratado como un factor de producción
intercambiable o sustituible por trabajo y tecnología (capital humano). Desde
la economía ecológica se argumenta que el capital humano y el capital
manufacturado son complementarios al capital natural, y no intercambiables, ya
que el capital humano y el capital fabricado derivan inevitablemente del
capital natural de una u otra forma.
Siguiendo en el enfoque académico, La eco economía estudia
de qué manera el crecimiento económico está relacionado con el aumento en la
explotación de insumos materiales y energéticos. Otro punto de confrontación
entre Eco Economía y la Economía convencional es la cuestión del comercio y el
medio ambiente, pues la primera considera que un incremento en el comercio
puede aumentar el daño ambiental. Los economistas ecológicos afirman que una
gran parte de lo importante en el bienestar humano no es analizable desde un
punto de vista estrictamente económico, sugiriendo la transdisciplinariedad de
las ciencias sociales y naturales como un medio para abordar el estudio del
bienestar económico y su dependencia de los servicios que proporciona la
naturaleza.
En la Eco Economía se discute sobre
indicadores de sostenibilidad, la validez de la curva ambiental de Kuznets, la
paradoja de Jevons, el efecto rebote de las estrategias de suficiencia, la
hipótesis de la desmaterialización de la economía, huella ecológica, inputs
directos y ocultos de materiales, tamaño de la economía y límites al
crecimiento económico, la medida del bienestar, estado estacionario, ecologismo
de los pobres (activismo de personas amenazadas por la destrucción de recursos
y servicios ambientales que necesitan para vivir), ecología política, los trabajos no remunerados, distribución justa de la renta (la
distribución precede a la producción), sostenibilidad fuerte frente a
sostenibilidad débil, deuda ecológica, coevolución de sistemas ecológicos y
económicos, biodiversidad, limitaciones de la tasa de descuento, relación de
los derechos de propiedad y la gestión de recursos naturales, instrumentos de
política ambiental, la justicia ambiental, y el metabolismo social entre otros
temas. La economía ecológica critica también la contabilidad macroeconómica,
proponiendo en cambio un conjunto de indicadores físicos y sociales, además de
los monetarios.
El mundo
actual y sus crisis
Actualmente la humanidad se enfrenta a una crisis ambiental y ecológica de gran magnitud. Problemas
como el agujero en la capa de ozono, el incremento de gases de efecto invernadero,
la pérdida de biodiversidad, el agotamiento de recursos tanto renovables como no
renovables, la contaminación del suelo y del aire, entre otros. Tanto las administraciones como las
instituciones científicas aceptan este hecho como incontrovertible. Los efectos del sistema económico de un país van mucho más
allá de sus fronteras. Podría decirse que el terreno de juego, ni tiene unos
bordes definidos, ni para nada coinciden con los límites territoriales del país
cuyos residentes y empresas ordenan las transacciones. Una economía como la
venezolana que es altamente dependiente de importaciones de materias primas,
debe aplicar con mayor rigor controles en el ámbito ambiental, ya muchos de estos
materiales importados conllevan una serie de impactos ambientales en los países
de origen que no acostumbramos a considerar y por ello adquirimos una
responsabilidad ambiental que habitualmente no es reconocida (cuando los
pueblos del Sur sufren nuestra demanda de materias primas). Incluso algunos de
los efectos ambientales que se producen aquí tienen efectos globales, emisiones
de gases invernadero.
En estos casos aunque la responsabilidad está en mayor
grado en los países industrializados, los impactos los transmitimos al exterior.
Finalmente la actuación directa de algunas transnacionales en otros países repercute positivamente en el
aspecto monetario de nuestra economía, pero conllevan importantes impactos
ambientales y sociales negativos de los cuales estas empresas son
responsables. Otro indicador interesante
sobre el efecto de la economía más allá de las fronteras es la huella
ecológica, que persigue medir la superficie necesaria para sustentar un sistema
económico. La eco economía permite constatar sin dar pie a demasiada discusión
que la superficie que “utilizan” los países industrializados para sus
necesidades es generalmente superior a la superficie existente dentro de sus
límites territoriales, lo cual viene a significar que se están apropiando de la
superficie de otros. ¿Cómo afecta la
contaminación a la economía global? Le afecta directamente, porque la
contaminación destruye los ecosistemas, medio ambiente, la atmósfera, hace
inservible e improductiva grandes extensiones de tierra, y destruye las fuentes
de los recursos hídricos y contamina el agua, que es importantísimo en cualquier
actividad económica. En muchas ciudades venezolanas se concentra la
industria, y por ello, la producción de energía y el transporte, razón por la
cual debe mayor acción gubernamental para generar conciencia.
¿Porque se dice que la contaminación ambiental es económica?
Las actividades económicas son parte esencial de la
existencia de las sociedades, ellas permiten la producción de riquezas, el
trabajo de los individuos y generan los bienes y servicios que garantizan su
bienestar social. Las actividades económicas son cada día más complejas y
requieren del uso y tecnologías más avanzadas, con el objeto de mantener la
productividad competitiva en un mercado cada vez más exigente. En la
actualidad, muchas actividades económicas son fuente permanente de contaminación. De esta
forma se nos presenta el problema de la necesidad de mantener y ampliar
nuestras actividades económicas por el significado social que ellas tienen en
la generación de riquezas; pero al mismo tiempo debemos tomar conciencia sobre
la contaminación ambiental que éstas causan, para buscar soluciones y mantener
el equilibrio ecológico y ambiental.
La eco economía: Una nueva mirada de economía
para el Mundo
¿Una Nueva economía es posible? La necesidad
de una nueva mirada El análisis de las relaciones entre el medio ambiente, la
energía y la Economía señalado anteriormente se corresponde con las críticas
hechas en los últimos años al paradigma económico dominante por su ausencia de
interdisciplinariedad, su concepción del sistema económico como un sistema
aislado del medio físico y su interés en el progreso y el bienestar material de
los individuos. La visión del sistema económico como un flujo circular
evidencia el carácter mecanicista de la economía convencional toda vez que
ésta, al centrar su preocupación en el intercambio de bienes y servicios por
valores monetarios, enfoca su estudio hacia fenómenos reversibles, los cuales
divergen profundamente de la naturaleza entrópica de las actividades de
producción y consumo que sustentan el proceso económico y que se refleja en la
crisis ambiental.
El hecho de que la economía convencional
hubiese dejado por fuera de su marco analítico durante tanto tiempo los
recursos naturales se refleja en la priorización que ella hace de los valores
monetarios, así como en el fomento del uso intensivo de los recursos naturales
–mediante el argumento según el cual estos son “bienes libres”– que ha
redundado en su creciente deterioro y falta de disponibilidad. No obstante,
estos cuestionamientos no suscitan aún un viraje suficientemente significativo
en la Economía, que lleve a una reconsideración del entorno natural en el cual
se insertan los fenómenos objeto de su estudio. En ese sentido, es de
subrayar que la forma como esta disciplina ha abordado los problemas asociados
al agotamiento de los recursos naturales y la contaminación ambiental revelan
el predominio de la preocupación por conservar y extender el radio de acción de
los enfoques convencionales, en vez de revisarlos con el fin de mejorar el
tratamiento de estos asuntos.
Al respecto, para que la Economía aborde adecuadamente los
problemas energéticos y ambientales, se sugiere adoptar una nueva mirada que tome
en cuenta las leyes de la termodinámica y, en particular, la ley de entropía,
que plantea que toda transformación material es irreversible y da lugar a la
generación de desechos físicos y energía disipada.
En tal sentido, se hace un llamado de
atención acerca de la necesidad de elaborar teorías que den cuenta
adecuadamente de lo que ocurre en los procesos de producción de bienes y
servicios y que contemplen tanto los inputs (recursos naturales y factores
productivos) como los outputs (productos y desechos) asociados a estos procesos. Asimismo, es
importante tener en cuenta que los precios no son indicadores apropiados del
valor de las funciones que desempeñan los ambientes naturales en el proceso
económico, por ello, se sugiere complementarlos con cuentas físicas de los
recursos naturales y de los impactos que las actividades económicas ejercen
sobre el medio ambiente. De esta manera, estos indicadores en su conjunto
contribuirían efectivamente a orientar la gestión de la naturaleza y detener la
ejecución de la parábola del hijo pródigo que, en su versión postmoderna,
plantea que: “El
hombre coge su parte de la herencia (recursos energéticos y materiales), la
malbarata, la agota y, al final, sólo le queda una salvación ´de fuera”
Julio C Utrera R
@jcutrera37
Referencias
Bibliográficas
Brown Lester (2001) “Eco Economía: la construcción de una economía
para el planeta” Fundación Polar – Venezuela
Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela (1999)
María Campos (2010) Economía Verde. Cegesti.
Yldefonzo Penso Acero “la
Eco-Economía como categoría para la construcción de una alternativa de desarrollo
para los países de la Comunidad Andina de Naciones” Universidad de Carabobo
Recuperado (enero 20, 2016) en: servicio.bc.uc.edu.ve/multidisciplinarias/estudios_culturales/.../art7.pdf
Catalina
Granda Carvajal (2012) “Relaciones Medio Ambiente-Economía La necesidad de una
nueva mirada” Universidad
de Antioquia
Diccionario
de Economía Política 2012
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